¡Mi disco abrasivo ya no funciona como antes!… ¿esto es normal?
La mayoría de los discos abrasivos tienen una vida útil limitada la cual dependerá, en gran medida, del material y el soporte estructural que los fabricantes hayan utilizado.
Generalmente, los discos son elaborados con compuestos de granos con propiedades abrasivas como el óxido de aluminio natural o sintético, o el carburo de silicio entre otros; sin embargo con el tiempo estos materiales pierde en cierta medida sus propiedades de desgaste o abrasivas sobre otras superficies llegando al punto de no ser tan eficientes como pudieron ser al momento de su manufacturación.
Conocer de forma precisa el periodo de vigencia del mismo suele ser complejo ya que intervienen una serie de factores externos que tienden a acelerar el tiempo de caducidad del disco (almacenaje, humedad, temperatura, uso, etc.). Un disco abrasivo como tal podría entregar su punto óptimo de funcionamiento durante 3 o 4 años en condiciones ambientales “estándar”, pero como ya se ha mencionado este tiempo podría ser más corto en función de los cambios que el medio ambiente podría experimentar.
Otro factor que hay que considerar es el material de soporte estructurar que mantiene la forma del disco. Estos soportes suelen ser muy variados tales como papel, tela (algodón o poliéster), combinaciones entre papel y tela, metal, o fibra. Todos estos materiales están sujetos al desgaste por el uso o las condiciones de almacenaje. Adicionalmente, el conjunto aglomerado pierde sus propiedades adherentes con el tiempo lo que conllevaría al colapso o ruptura del disco en pleno uso.
Pero, ¿cómo puedo saber cuándo vence mi disco?… La imagen 1 nos muestra la forma más común que los diferentes fabricantes nos ofrecen para conocer un estimado de vida útil.
Imagen 1. Fecha de caducidad de un disco abrasivo
Por lo general cada fabricante emplea el anillo metálico que se encuentra en el centro del disco para indicar la fecha de caducidad o vencimiento. Como se puede apreciar en la imagen, se antepone la letra “V” en mayúscula a la fecha de vencimiento que en este ejemplo sería Septiembre de 2025 (V09-2025).
De igual forma, si la información no está presente en el anillo central la misma podrá ubicarse sobre la etiqueta del producto siempre antecedida por la letra “V”, lo mismo ocurría si el disco no posee anillo central. Ahora bien, si no se especifica la fecha de vencimiento el material del disco no caduca.